¿Sabías que la fascitis plantar es una de las causas más comunes del dolor en el talón? Se trata de una inflamación de la fascia plantar, un tejido conectivo que recorre la planta del pie desde el talón hasta los dedos. Imaginá que una banda elástica sostiene el arco de tu pie: cuando esta banda se inflama o se desgarra, aparece el dolor.
Habitualmente, la inflamación ocasiona un dolor punzante que suele aparecer al dar los primeros pasos luego de levantarse por la mañana. Después, el dolor normalmente disminuye, pero puede reaparecer si estamos de pie por mucho tiempo, o si estuvimos sentados por varias horas.
Pero, ¿por qué ocurre?
La fascitis plantar puede desarrollarse por varias razones, muchas de las cuales están relacionadas con el estilo de vida y cuestiones biomecánicas. Algunos factores que pueden provocarla son:
Conociendo las posibles causas, se pueden implementar ciertas acciones para reducir el riesgo de sufrir fascitis plantar, como la elección de un buen calzado, el mantenimiento de un peso saludable, y el precalentamiento antes y después de realizar actividad física intensa.
La buena noticia es que la fascitis plantar suele mejorar con el tiempo y con el tratamiento adecuado. En todos los casos, es importante consultar con un especialista para que evalúe el cuadro y realice las pruebas que considere necesarias.
Algunas recomendaciones habituales que puede darte un especialista son:
Reposo y terapia de frío: El primer paso es darle un descanso a tu pie. Evitá actividades que agraven el dolor y aplicá hielo en el área durante 15-20 minutos al día para reducir la inflamación.
Fisioterapia: Un fisioterapeuta puede guiarte en ejercicios específicos que estiran y fortalecen la fascia plantar y los músculos circundantes. Estos ejercicios suelen ser muy importantes para una recuperación duradera.
Plantillas ortopédicas: Las plantillas ayudan a redistribuir el peso de tu cuerpo en el pie, aliviando la presión sobre la fascia. Son una solución efectiva, especialmente para aquellos con problemas biomecánicos.
Antiinflamatorios: Los medicamentos pueden proporcionar alivio temporal al reducir la inflamación. Sin embargo, deben usarse con moderación y siempre bajo la recomendación de un médico.
Tratamientos avanzados: Cuando los métodos conservadores como las que mencionamos antes no dan resultado, existen opciones como las inyecciones de corticosteroides, que pueden reducir la inflamación directamente en el área afectada, o la terapia extracorpórea por ondas de choque (ESWT), que utiliza ondas de sonido para estimular la curación.
Las plantillas para descanso en gel polimérico Suavepie están diseñadas para activar pies cansados con problemas de fascitis plantar, plantalgias, espolón calcáneo, hiperqueratosis plantar, dolor de artritis, o tendinitis. Se presentan en dos modelos: Plantilla 3/4, y Plantilla Largo Total. En aquellos casos en los cuales se necesite aliviar presión en los dedos por apoyo, se aconseja la plantilla entera o de largo total.
Ambas son ideales para prácticas deportivas, porque amortiguan el impacto de los pies contra el suelo durante la marcha. Poseen una zona de menor dureza en el talón y en el apoyo de las cabezas metatarsianas para lograr una descarga adecuada, por lo que pueden reemplazar a la plantilla que viene con cualquier calzado deportivo. Están confeccionadas en gel polimérico y una cubierta de tela de poliéster que evita la transpiración del pie y otorga sensación de confort.
El contenido de este artículo no constituye opinión médica, ni reemplaza una consulta con un profesional de la salud. Por favor, ante cualquier duda, ponete en contacto con tu médico.